TENDENCIAS INVITADA 2025
Empieza el año y empezamos a buscar esos vestidos especiales que necesitamos para bodas o eventos importantes de los próximos meses.
En 2025 las invitadas se centran en la elegancia, sin olvidar el confort. Vamos hablar de las tendencias que se imponen este año, pero no tenemos que olvidar que lo más importante es encontrarnos cómodas con la elección que hagamos.
Empezamos hablando de colores.
El mocha mousse, un marrón cálido. Ha sido nombrado el color de este año. Es un color neutro fácil de combinar. Una opción muy acertada consiste en llevar este color con otros tonos tierra, creando un estilismo cálido y armónico.
El verde lima, un color muy hipnótico y vibrante. Combina bien con el azul marino, el blanco o el gris. Colores que compensen con su impacto visual. Es recomendable llevarlo con accesorios plateados. Si es demasiado impactante para ti, puedes probar con pequeñas dosis, como en el bolso o los zapatos.
El rosa empolvado, azul bebé o malva son colores perfectos para llevar en total looks, al aportar mucha luminosidad y dulzura. Así que no dudes en combinarlo con los zapatos y hasta el bolso. También veremos la combinación del rosa con el burdeos, otro color que seguirá siendo tendencia en 2025.
Amarillo pastel, los tonos vainilla y crema también han teñido las pasarelas. El Mix de estos colores con el blanco es una mezcla muy acertada. Aunque puedes atreverte a coordinarlo con colores antológicos, más llamativos.
Veremos estampados floreados que parecen sacados de una pieza de porcelana, prints exóticos y las mezclas cromáticas. También siguen en tendencia los colores metálicos como el plateado, dorado y cobrizo. Aunque con mayor importancia el plateado.
Por último se llevarán looks de contrastes. Es un recurso que ya hemos utilizado en accesorios, pero este año veremos como sucede en la combinación de prendas.
Vuelven los vestidos vaporosos y caídas suaves. Se renuevan los patrones bajando la cintura y situando el corte en cadera. Jugando así con drapeados y faldas con líneas fluidas que abren a esa altura.
Los detalles de encaje y pedrería se modernizan con patrones más geométricos y atrevidos. El brillo no solo lo veremos en pedrería, sino que estarán muy presentes en las lentejuelas. Las transparencias se consolidan, en dosis sutiles y elegantes. Sobretodo en mangas y escotes. Recuperaremos las faldas de tul y diseños con este tejido.
Los conjuntos de dos piezas continúan siendo una opción cada vez más popular. Desde blusas con faldas largas, hasta pantalones palazzo con tops ajustados. También damos la bienvenida a los trajes oversize, pantalones de pata ancha con blazers masculinas.
En cuanto a escotes , veremos muchos vestidos de palabra de honor o escote corazón. Los cortes asimétricos, tanto en vestidos como en tops y faldas, también seguirán siendo una tendencia fuerte. El volumen en la parte superior haciendo referencia a los años ochenta juega un papel importante. Sobretodo en forma de volantes y hombreras.
No podemos olvidar el escote de la espalda, siendo tendencia la espalda escotada.
Si hablamos accesorios jugarán un papel muy importante los pendientes largos, diademas y coronas con detalles florales, haciendo de los tocados grandes protagonistas de nuestros looks. Sin olvidarnos de los lazos que seguirán en todas sus formas y tamaños. Empezamos a ver guantes de ópera en los estilismos de noche, sobretodo jugando con la transparencia que nos proporciona el tul.
Con estas tendencias en mente, no olvides que la moda es una forma de expresión muy personal. Elige un look que te haga sentir única, cómoda y preciosa.
